
No salgo de mi asombro. Estoy acostumbrado -demasiado acostumbrado- a escuchar a mentirosos compulsivos y, sobre todo, a psicópatas. También a ladrones -¿Verdad, Ambrosio, o miento? y a quienes se erigen en lo que no son, e incluso hay gente que se lo cree. Y otros -demasiados- que creen al mentiroso. Otro día hablaré de Ambrosio, el ladrón. Hoy toca cosa diferente
Hace un tiempo escribí un artículo con datos muy concretos sobre la extinta Banda Municipal de Música de Lorca, asesinada por quien fue nombrado su encargado tras una serie de avatares propios de un vodevil para hacerse con la «propiedad» de la banda y de la escuela de música asociada a ella. Porque banda y escuela SIEMPRE han ido asociadas.
Esto último lo va a entender hasta el lector menos ducho en temas musicales. La escuela se crea como semillero desde donde surtir de músicos a la banda. Tan sencillo como eso. Y para que el semillero fructifique, quien se tiene que hacer cargo de él es quien se va a beneficiar de sus mimos y cuidados, es decir, la banda. Banda sin escuela es como jardín sin plantas.
Dicho lo cual, ayer tuve la ocurrencia de escuchar a un funcionario jubilado lorquino que con voz quebrada por el falso dolor de quien sabe que no es nadie, y que nunca lo ha sido, arremete contra sí mismo poniendo el foco de su frustración en todo y en todos. Menos en él. Repartiendo la mierda que ha comido -son sus palabras recogidas en un «magnetofón»- precisamente cuando es el primero que debía estar escondido en lo más profundo de las entrañas de la tierra para nunca más asomar.
Quien piense que estoy hablando de un tal Manzanera, ha acertado
Antonio Manzanera López, funcionario del Ayuntamiento de Lorca durante demasiados años. Hijo de funcionario. Con domicilio desde su nacimiento en Plaza de España, 1, 30800-LORCA, accesorio lateral. Porque Antonio Manzanera, hijo de funcionario franquista -repito por si no había quedado claro- y, por tanto, rojo sobrevenido, como casi todos los rojos, vivió gratis total en la propia casa de todos los lorquinos: su Ayuntamiento. Casa de él, de Manzanera, más que de ningún otro lorquino que no tenía ese priviliegio. Antonio Manzanera vivía exactamente en el mismo lugar donde se ubica actualmente el salón de plenos municipal, desde el derribo/destrozo de la sede consistorial perpetrado por José Antonio Gallego López, que convirtió un edificio noble en una ordinariez digna del personaje.
El podcast
Resulta que se me ha ocurrido escuchar un podcast, lo que antes se conocía como una grabación, que se podía y se puede oir en cualquier sitio y momento. No voy a hacer publiciad gratuita de una radio pirata y, por tanto, no procede pasar enlaces ni dar nombres del sitio en cuestión. Radio pirata que oir a sus «locutores» es cómico, cuando arrastran unas eses impostadas y dicen «pos». Cada cual hace y dice lo que puede. Yo diré otras cosas, probablemente.
En ese podcast, grabado el primero de abril de 2025, LXXXVI AÑO TRIUNFAL, el doliente Manzanera se lame las falsas heridas. Falsas como sus palabras. Comienza autonombrándose «director de la Banda Municipal de Música de Lorca». Miente. Por decreto de la alcaldía de 14 de febrero de 1984, día de los enamorados, Antonio Manzanera López es nombrado «encargado», con carácter eventual, de la Banda Municipal de Música de Lorca por fallecimiento del director, Sr. Rosell Cebrián unos meses atrás. Un encargado no es un director, es un encargado; igual que un perro no es un gato. Con perdón a perros y gatos por compararlos con el falso director. Lo de las peras y las manzanas de la ínclita Botella, vamos.
Me va a permitir el sufrido lector que no aporte el documento. Cada vez que lo he hecho me han acusado del manejo creo que de Photoshop, con lo cual lo tienen Ustedes muy sencillo: hagan una petición al Archivo Municipal solicitando copia del nombramiento y verán qué risa. Yo la hice y jamás me contestaron, cosa que me la suda, si se me permite la expresión, porque dispongo igualmente del documento. Por cierto, Santos, de los himnos de Semana Santa también tengo copia. Y lo mismo os digo a los ya expresidentes Diego y José María. Me la pela, pero os habéis retratado…
Dice el Manzanera en la radio pirata que está «muy cabreado con lo de la banda de música municipal, porque «dende» que se creara en 1927… «mientras no se demuestre lo contrario, para mí sigue siendo municipal». O algo así.
Te lo demuestro, Manzanera. Ahora sí que copio y pego «documento» porque está en Internet al acceso hasta tuyo, suponiendo que sepas lo que es el Internet y/o que sepas cómo funciona. Tú dirías «junciona».
Datos Generales de ASOCIACION CULTURAL TALLER DE MUSICA Asociación
- Fecha de actualización02 abril 2025
- DenominaciónASOCIACION CULTURAL TALLER DE MUSICA Asociación
- Marcas y nombres comercialesASOCIACION CULTURAL TALLER DE MUSICA Asociación
- NIF de ASOCIACION CULTURAL TALLER DE MUSICA AsociaciónG73058562
- Forma jurídicaAsociación
- Dirección de ASOCIACION CULTURAL TALLER DE MUSICA AsociaciónCALLE LOPE GISBERT, 39, 2. 30800, LORCA (MURCIA). ESPAÑA.
- Código postal30800
- MunicipioLorca
- ProvinciaMURCIA
- Sitio web
- CNAE8559 – Otra educación (no comprendido / clasificado en otra parte)
- Objeto social de ASOCIACION CULTURAL TALLER DE MUSICA Asociación
- Sector de la empresaEducación
- Fecha de constitución
- 01/01/2000
https://www.iberinform.es/empresa/8609334/asociacion-cultural-taller-de-musica
Y dirá el «ignorante» lector, dicho sea sin acritud, porque el lector no tiene por qué conocerlo todo, para eso lee esto, para «culturizarse» y «designorar» cosas que hasta ahora ignoraba: ¿Qué tiene que ver esto con la banda o la velocidad con el tocino? Lo explico.
La Banda Municipal de Música de Lorca, cuyo embrión se inició a finales del XIX a través del Regimiento, tuvo un resurgir en 1926 gracias al buen hacer del director de la banda del mismo. Fue en ese año cuando un grupo de lorquinos, auspiciado por dicho señor, se reunió en la capilla de Beneficencia del hospital de San Francisco y se decidió crear lo que denominaron la «Sociedad Santa Cecilia» con el fin de crear una escuela de música y una banda que sin estar bajo el auspicio económico o material del Ayuntamiento sería imposible su creación, continuidad y buen hacer. Y fue mi pariente Moisés Ippólito quien siendo concejal de la cosa cultural impulsó ambas, y bajo la batuta del director de la banda de música del Regimiento España 46, con sede en Lorca, el Ayuntamiento concede una subvención a la Asociación Santa Cecilia en forma de local e instrumentos, materializándose los primeros ensayos y clases «oficiales» a principios de 1927. Aunque la prensa de la época hablaba de «banda municipal», era realmente la banda de la Sociedad Santa Cecilia. Y su director, D. Eusebio Rivera, militar.
Pero, ¿cuándo se crea realmente la Banda Municipal de Música de Lorca? ¿Y cuándo se disuelve?
La Sociedad Santa Cecilia, con el estallido de la guerra, tras el golpe de estado del PSOE, en 1934 -que abortó, por orden del gobierno republicano un tal general Francisco Franco Bahamonde- y tras el pucherazo electoral de 1936, con el consiguiente asesinato de Casado y Calvo-Sotelo, estalla la contienda fratricida el 17 de julio de 1936 en la España africana y se extiende al resto de suelo patrio, hasta su finalización hace ayer exactamente 86 años.
Necesitada aquella España destruida y expoliada por el rojerío de la época -comunistas, anarquistas y demás ralea-, incluyendo la catedral de San Patricio -sí, he dicho catedral- y sus dos magníficos órganos del siglo XVIII ¿Te suena, Manzanera? ¡Ah, no! Imposible que suene nada en San Patricio porque «los tuyos» se encargaron de no dejar rastro de los órganos. Aquellos demócratas… Decía que se necesitaba de una banda con la que amenizar veladas y saraos de barrios y pedanías. Y es en 1944 cuando llega a Lorca el primer director del Cuerpo Nacional de Directores para hacerse cargo de la todavía inexistente Banda Municipal de Música contando con el buen hacer de los músicos que hacían lo que podían hasta su llegada. Se llamaba Miguel Gimeno y era valenciano. Ahí está el origen y no antes.
Siento darte el disgusto, Manzanera, porque en 2044, centenario de la creación de la Banda Municipal apostaría a que habrás cambiado tu domicilio actual a otro de menores dimensiones en la pedanía de La Torrecilla donde estarás, muy probablemente, durmiendo la pesadilla de los injustos, envenenando malvas. Yo no. Yo las envenenaré en otro sitio.
Se da la circunstancia de que gracias a la paz duradera y a la estabilidad política que durante casi curaenta años nos trajo el «dictador» ése que decía aquello de «Haga Usted como yo y no se meta en política», la Banda (con mayúscula) se creó y fructificó, llegando al culmen con el último de los directores del Cuerpo y penúltimo de la Banda Municipal. El último se llamaba -y se llama- Antonio Meca García, quien fue nombrado «Director de la Banda Municipal de Música de Lorca» en 1991. El Sr. Meca no formaba parte del Cuerpo, ya extinguido. Ruego que no confundamos la Historia con lo que algún retrasado puede confundir con la exaltación de quien ordenó el asesinato de mi abuelo. Así que seamos serios y no mezclemos Churras con Merinas.
Dicho lo cual, y tras el paso de varios directores del Cuerpo Nacional por la mal llamada Ciudad del Sol, siendo el último, por fallecimiento prematuro, D. Rafael Rosell Cebrián, valenciano de pro, lorquino de adopción, abuelo y bisabuelo de lorquinos -su bisnieta, Victoria Rosell, acaba de cumplir su primer año de vida-, cuyo legado ahí está y cuyos pupilos siguen, en su inmensa mayoría, vivos y soplando el pito.
El final
Y vuelta la burra al trigo, es decir, vuelto a ser encargado accidental de la entonces todavía Banda Municipal el Manzanera en junio de 1993, comienza el principio del fin y, finalmente, el primero de enero de 2000 se constituye ex profeso -¡qué casualidad!- una ASOCIACIÓN denominada «Asociación cultural Taller de Música» a la que el Ayuntamiento de Lorca, siendo el funcionario-técnico musical un tal Antonio Manzanera López, quien también fue concejal comunista, se le nombró por decreto -lo que se conoce como dedazo- «funcionario coordinador» de la banda de dicha asociación creada ad hoc a la que se le encargó hacer las veces de lo que hasta ese momento había sido la Banda Municipal de Música de Lorca, que duró 56 años y que entre todos la mataron y ella sola se murió.
Desde aquella infausta fecha, la banda dejó de ser municipal para pasar a ser la banda de la Asociación cultural Taller de Música. Y tras diferentes denuncias por irregularidades cometidas contra los derechos de los trabajadores, que nos van a costar a todos los lorquinos la friolera de 475.000 euros -la cama, aparte- el actual concejal de Cultura, Sr. Parra, hubo de cortar por lo sano y contratar, supongo que de forma provisional y «de aquella manera» una banda compuesta por parte de los viejos músicos de la banda de la anterior asociación, y de gente nueva, y por Lorca han comenzado a tocar, contratado el servicio externo por el Ayuntamiento, para que continúen con lo que se supone que debe hacer una banda de música: actuar.
Y, ahora, Santi, toca iniciar la licitación para el funcionamiento regular y continuado en el tiempo de los servicios musicales. Los mismos que se externalizaron el 1 de enero de 2000, y que así continúan y, espero, que así continúen, porque tú y yo -y alguno más- sabemos que la empresa privada nos ahorra impuestos. No hace falta poner ejemplos.
Resumiendo: creación de la banda municipal en 1944, defunción en 2000. Veinticinco años sin banda municipal, como ocurre en el 95% de poblaciones similares a Lorca. Por eso no entiendo -o no quiero entender- ni las declaraciones del Manzanera, que fue el asesino de la banda -entiéndaseme- ni las de la concejala Mazuecos dando por buena la existencia hasta anteayer de una banda municipal desaparecida hace veinticinco años y tres meses. Del Sosa, ni hablemos. Ése ya ni se acuerda ni de cómo se mata un «chino».
Y, por cierto, según las últimas averiguaciones, no existió ni un solo funcionario asignado a la Banda Municipal a lo largo de su historia, salvo el director, hasta que el Sr. Rosell convocó oposiciones restringidas. Y ahí entró como funcionario el llorón Manzanera, el zagal del conserje del Ayuntamiento que se crió en el propio Ayuntamiento gratis et amore. Entre otros varios a los que les cambió totalmente la vida. ¿Cuántos funcionarios han entrado en la banda desde que el Manzanera se encargó de ella? ¿Ninguno? ¿Amortizó sus plazas conforme se jubilaban o pasaban a hacer otras funciones dentro del Ayuntamiento?
¿Aclarado?
De Nada.
FJ Álbarez-Fajardo, escribidor
Foto: archivo histórico. Banda Municipal de Lorca. Año 1945.