De esa manera, ya saben los futuros hombrecicos adónde dirigirse después de pagarle a los esclavistas de la patera creyendo que en España estamos siempre de vacaciones y que aquí se atan los perros con longaniza
Según publica el gabinete de prublicidad y propaganda del consistorio lorquino:
“Vacaciones en Paz” arranca una nueva edición con el objetivo de duplicar el número de familias. El proyecto está organizado por la Asociación de Amigos del Pueblo saharaui junto con Sonrisa Saharaui Región de Murcia, y cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Lorca. Esta iniciativa solidaria permite que niños provenientes del desierto saharaui puedan recibir atención médica adecuada y una alimentación equilibrada, además de disfrutar en un nuevo entorno más digno durante los meses estivales.
“Esperamos que este año los lorquinos se sumen a la iniciativa y las familias de acogida se dupliquen. El año pasado fueron seis los niños que fueron acogidos en hogares del municipio y nos gustaría que este verano pudieran ser más. No hay que olvidar que estos pequeños viven en una situación muy desfavorable y traerlos a nuestra ciudad permite que puedan escapar de las durísimas condiciones en las que sobreviven en el desierto del Sáhara, y que se hacen mucho más duras durante los meses de verano”.
“Aquí podrán recibir una atención médica adecuada y una alimentación equilibrada, además de disfrutar de un nuevo entorno más digno, que les permita vivir nuevas experiencias, desde tener agua corriente o bañarse con agua caliente hasta comer en un restaurante, ir al cine, a la piscina o ver el mar, actividades que para nosotros forman parte de nuestro día a día pero que ellos no han vivido… Ni siquiera, imaginado. Por eso quiero animar desde aquí a todos los lorquinos a que conozcan un poco más este programa solidario y se sumen para que más niños puedan salir de esa situación tan desfavorable en la que viven”.
Desde el Ayuntamiento de Lorca, afirman, “agradecemos la enorme labor de las Asociaciones integrantes en el programa por hacerlo posible, y no dudaremos en seguir colaborando para que esta bella iniciativa solidaria se haga cada vez más visible y más pequeños puedan escapar de las durísimas condiciones en las que viven”.
Lorca Digital, opina
Querido Antonio, lo dicho, seis futuros inmigrantes en patera y este año queréis que se multiplique.
Sé que lo hacéis con toda vuestra buena voluntad, pero este último año he tenido ocasión de conocer de primera mano a varios de esos antiguos «niños saharauis» -los que han sobrevivido al paso del estrecho y de otros más largos y peligrosos- y desde que volvieron de España, de esas «idílicas vacaciones» con lo único que soñaban era con volver a repetirlas indefinidamente.
No voy a meter el dedo en el ojo, que bastante tienen con lo que tienen, pero no es bueno alimentar a la bicha, ni por ellos ni por los demás.
¿Que tienen «derecho» a vivir unas «vacaciones en paz»? Yo también tengo muchos «derechos» y muchas obligaciones. Tengo hasta «derecho» a que el Ayuntamiento me pague un viaje al Caribe, fuera de temporada de huracanes, con alojamiento y compañía de fermosas mulatas, pero ya ves. Te lo dejo ahí, por si tienes a bien pagármelo. Te estaría eternamente agradecido.
Imagino que el médico se lo pagaréis vosotros, claro…
Lo mismo que te digo a ti, Antonio, se lo escribo a mi sobrina Belén. Por cierto, Belén, no me llores más porque no tengas pisos que ofrecer a los pobres inmigrantes, y no inmigrantes, porque si te ofrecen pisos y no das ni respuesta… Tú sabrás qué directrices sigues y quién te las da.
Sin acritud y sin vulnerar leyes, atendiendo a dos de esos derechos: el de opinión y el de información.
FRANCISCO J. ÁLVAREZ-FAJARDO, escribidor. Tío y viajero caribeño frustrado